PERDICIÓN ADICTIVA
Más allá de la existencia y el conocimiento,
existe la adicción,
sé que está mal, pero lo hago,
sé que me hace daño, pero continúo.
Es más que aberración,
un impulso incontrolable me hace verte,
renuncio a mi propia voluntad
y me deslizo lentamente en la perdición.
Una y otra vez y no termino de entender
porqué el hombre es reacio a la comprensión,
intento cerrar este círculo vicioso;
no obstante, sin control vuelvo a lo mismo.
Retengo mi deseo de buscarte,
apago y cierro todo a mi alrededor,
trato de pensar en algo más;
sin embargo, ni la lectura lo puede retener.
Busco barreras, fronteras creo por doquier,
me encasillo ensimismada en mi interior,
pero constante y enfermizo estás allí,
arañando mí ser con desesperación.
Luzaván.
Más allá de la existencia y el conocimiento,
existe la adicción,
sé que está mal, pero lo hago,
sé que me hace daño, pero continúo.
Es más que aberración,
un impulso incontrolable me hace verte,
renuncio a mi propia voluntad
y me deslizo lentamente en la perdición.
Una y otra vez y no termino de entender
porqué el hombre es reacio a la comprensión,
intento cerrar este círculo vicioso;
no obstante, sin control vuelvo a lo mismo.
Retengo mi deseo de buscarte,
apago y cierro todo a mi alrededor,
trato de pensar en algo más;
sin embargo, ni la lectura lo puede retener.
Busco barreras, fronteras creo por doquier,
me encasillo ensimismada en mi interior,
pero constante y enfermizo estás allí,
arañando mí ser con desesperación.
Luzaván.
